La educación es la raíz : la flor; y la sabiduría, el fruto. El propósito de la educación es cultivar la naturaleza superior del hombre. La verdadera educación consistiría en la formación del hombre como tal. Debe de estar destinada a formar la personalidad y el carácter y a desarrollar los poderes latentes del niño en su vida ética, intelectual, física y espiritual. La cabeza, el corazón y la mano deben ser entrenados a la vez por medio de una educación artística, científica y práctica. Debería llevarse a cabo un desarrollo armónico del cuerpo, la mente, el intelecto y el espíritu. Sólo entonces será rápida la evolución del ser humano.
Por lo tanto, la educación debe dirigirse a fomentar una vida plena y un pensamiento elevado. Primero, capacitando al estudiante para adaptarse a su entorno y prepararse para la vida. Después, enseñándole a ser veraz, honrado, osado y humilde. Se le debería enseñar a practicar una conducta, vida, acción y pensamiento rectos. La educación debe desarrollar el carácter, la iniciativa y el espíritu de servicio a la humanidad. El estado supremo de superconsciencia supondría la culminación de toda verdadera educación y cultura.
Maestro y Estudiante:
En la antigua India había una relación muy íntima entre el estudiante y el maestro. Era similar la existencia entre un padre amable y su hijo. No era de naturaleza comercial. El maestro y el estudiante se entendían bien mutuamente, existía un vinculo espiritual profundo entre ambos. El maestro hacía de guía amistoso del estudiante, sin mostrarse nunca como un preceptor superior y dominante. El estudiante, respetaba y amaba al maestro. Una de las primeras responsabilidades del maestro consistía en ganarse el respeto y el amor del estudiante. Sólo entonces era su enseñanza efectiva.
Los maestros en la antigüedad constituían, en sí mismos, ideales dignos de ser imitaos por sus estudiantes. Éstos tenían un espíritu de dedicación.
En los maestros y profesores de colegio y universidad de hoy en día yace el deber de entrenar adecuadamente a los estudiantes. Ellos mismos deberían ser estrictamente éticos, pues sólo entonces pueden enseñar a seguir el camino adecuado. El mero logro intelectual no debe hacer por si solo al profesor.
Si comparamos el sistema de educación presente con el antigüo sistema que era: (transmisión de conocimiento de maestro a discípulo por medio de la convivencia), en este método de enseñanza todos los estudiantes comprendían acerca de: la importancia de la respiración, el poder que tienen los pensamientos, la necesidad del ejercicio físico y de la esencia de leer acerca de la espiritualidad para constituir seres humanos cuidando el mundo. Existía un código ético, humildad, autocontrol, espíritu de servicio y auténtico deseo de adquirir conocimiento interno.
El estudio Hoy.
Los estudiantes, hoy día no suelen poseer estas cualidades. Desconocen el autocontrol. La arrogancia, la impertinencia y la desobediencia pueden arraigarse en muchos de ellos. A edades muy tempranas pueden convertirse en materialistas convencidos.
Las mentes de nuestros estudiantes se ven ocupadas en muchos casos por malas prácticas que arruinan su salud. No existe una cultura ética en las escuelas y las universidades modernas. Nuestros muchachos llevan una vida artificial ocupada a menudo por la moda, la glotonería y el lujo.
Los orígenes
La educación debe basarse en una filosofía sana de la vida. Si no se tiene una comprensión adecuada de la finalidad última de la vida humana, si no se tiene una idea clara de aquello en lo que debe convertirse el hombre a través del proceso de la vida, ningún esquema educativo será satisfactorio ni provechoso.
La educación es un entrenamiento para la vida, en el cual la ética juega un papel predominante. La educación del intelecto sin una disciplina moral es perjudicial para el progreso humano. La educación inteligencia sin un carácter ético es una fuente de peligro, tanto para el individuo como para quienes le rodean. No es necesario detallar el uso que de la inteligencia se ha hehco en las guerras y tantos actos de barbarie cometidos por el hombre recientemente. El desarrollo del cuerpo y del intelecto por sí solos, sin una disciplina moral, producirá hombres y mujeres egoístas que no albergarán ningún sentimiento ni compasión hacia los demás, ni respeto por sus mayores, por los sabios, por la vida.
Nuestros colegios y escuelas actuales proporcionan una educación en la que se aprende algo sólo para ganarse la vida.
El estado secular no tiene que ser necesariamente un estado ate. Sea como fuere, si no se desea introducir las enseñanzas de alguna religión en particular, ello no implica que no debe excluirse también del sistema una enseñanza espiritual amplia.
Educación Sin Valor
Nuestras escuelas y colegios se han convertido en lugares de comercio. Nuestros graduados corren tras el dinero, el poder, las comunidades, los honores y los títulos. La educación ha perdido hoy día su valor. Se ha fragmentado. No es integral ni rica ni plena. Sin embargo, la educación puede construir o destruir la civilización. Las universidades no deben ser instituciones para sobrecargar de información, sino santuarios de luz y sabiduría.
Se puede conseguir mucho más por medio de la educación adecuada que por medio de la ley. Si se educa al hombre interno de manera integral, no sólo estaremos haciendo un gran servicio al individuo en sí, sino también a la humanidad y al mundo en su totalidad.
No te olvides:
- El proceso de la educación es cultivar la naturaleza superior del hombre.
- La educación debe dirigirse a fomentar una vida plena.
- Primero debe capacitar al estudiante para adaptarse a su entorno.
- Después ha de enseñar a los estudiantes a ser veraces, honrados, osados y humildes.
- Desarrolla el carácter, la iniciativa y el espíritu de servicio a la humanidad.
- Los maestros en la antigüedad constituían ideales dignos de ser imitados.
- La educación puede construir o destruir la civilización.
- La educación debe basarse en una filosofía sana de vida.
- El desarrollo del cuerpo y del intelecto sin una disciplina moral produce hombres y mujeres egoístas.
- Edúcate de manera integral; harás un gran servicio a la humanidad y al mundo en su totalidad.
